El tubo de acero corrugado ha pasado de ser una simple opción estructural a convertirse en una pieza clave en proyectos de infraestructura vial, pluvial y civil a gran escala.
Se trata de un tubo fabricado en acero con superficies onduladas o acanaladas, lo que le otorga una gran resistencia estructural, especialmente útil en terrenos con exigencias de carga o condiciones ambientales adversas.
Su estructura permite manejar eficientemente la presión del terreno, adaptarse a movimientos del suelo y, gracias a su geometría, facilitar el flujo de agua, aire u otros elementos.
Tipos de tubo de acero corrugado: helicoidal, circular y abovedado
La versatilidad de esta tubería no solo radica en los materiales o los recubrimientos, sino también en la variedad de formas que ofrece. Los tres tipos más comunes son:
- Corrugado helicoidal: Ideal para tramos largos y con menores requerimientos de juntas. Se fabrica con costuras soldadas a tope o engrapadas, lo que mejora su continuidad estructural.
- Forma circular: Clásico en alcantarillado y conducción de aguas. Su geometría permite un flujo constante y predecible.
- Abovedado o «arch»: Utilizado cuando se requiere baja altura de instalación sin perder capacidad hidráulica. Es común en pasos vehiculares o áreas urbanas con restricciones de espacio vertical.
Los tubos HEL-COR, por ejemplo, combinan corrugado helicoidal con opciones de forma circular o abovedada, ampliando el abanico de posibilidades según las necesidades del proyecto.
Esta configuración facilita su instalación con coples tipo HUGGER, optimizando tiempo y eficiencia.
La posibilidad de elegir entre estas variantes permite que ingenieros y proyectistas encuentren exactamente lo que necesitan en función del tipo de obra, del terreno y del caudal esperado.
Materiales disponibles: galvanizado, aluminizado y con recubrimiento polimérico
Una de las decisiones más críticas al elegir un tubo de acero corrugado es el material, ya que esto determinará su durabilidad frente a la corrosión, abrasión o exposición a químicos.
1. Acero galvanizado
Es la opción más económica y ampliamente utilizada.
Se trata de acero recubierto con una capa de zinc mediante galvanización en caliente, lo que le da una buena resistencia inicial a la corrosión.
Es ideal para zonas con bajo contenido ácido o con agua de escorrentía limpia.
2. Acero aluminizado tipo 2
Ofrece una mayor protección que el galvanizado.
Este recubrimiento, compuesto por aluminio, proporciona una vida útil significativamente más larga en ambientes agresivos, especialmente donde la resistividad del suelo es baja o hay presencia de cloruros.
3. Recubrimiento de polímero
El más avanzado en términos de durabilidad.
Es una capa resistente a químicos y abrasión que encapsula el acero, haciendo que la tubería resista más de 100 años en ambientes hostiles. Perfecto para rellenos sanitarios o zonas industriales.
En nuestra experiencia, seleccionar entre estos materiales depende mucho del análisis de suelos y del ciclo de vida esperado del proyecto.
Aplicaciones clave: desde alcantarillas hasta sistemas de detención pluvial
El tubo de acero corrugado es un comodín técnico en todo tipo de proyectos de infraestructura. Estas son algunas de sus aplicaciones más comunes:
Alcantarillas
Soportan grandes cargas y permiten una rápida evacuación de aguas pluviales. Son especialmente útiles en zonas rurales o vías rápidas.
Sistemas de detención pluvial
Se emplean para controlar el flujo de agua durante tormentas, evitando inundaciones. Gracias a su diseño estructural, permiten almacenamiento temporal y descarga controlada.
Puentes pequeños y pasos vehiculares
Sustituyen estructuras de concreto más costosas, ofreciendo excelente desempeño estructural y menor tiempo de construcción.
Ductos técnicos y canalizaciones
Son utilizados para alojar cables eléctricos, conducciones industriales o como túneles de inspección. Su forma y resistencia facilitan el paso peatonal o vehicular encima.
En todos estos casos, hemos comprobado que el tubo HEL-COR responde bien incluso en condiciones de flujo variable y carga intensa.
Gracias a su disponibilidad en diferentes diámetros, longitudes y espesores de pared, puede ajustarse sin problema a cualquier escenario.
“La gran ventaja del tubo de acero HEL-COR es que ofrece amplia variedad de opciones, permitiendo adaptar la resistencia química al entorno específico de tu obra«.
Ricardo Serrano | Gerente General de Yakuha
En YAKUHA, como proveedor líder, ofrecemos no solo los productos de alta calidad, sino también asesoría técnica y fichas detalladas para garantizar una instalación profesional en cualquier contexto.
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